Ervin Santana, quien ha sido anunciado para lanzar por los Tigres del Licey. El zurdo Pedro Viola estará actuando los Gigantes en la tarde de hoy.

por: JULIO VALDEZ

La celebración podría ser doble para los Tigres del Licey que esta tarde buscarán quedarse con la corona del torneo de béisbol otoño-invernal dominicano 2007-2008, que hoy presenta el quinto partido de su serie final.

El estadio Quisqueya acogerá, desde las 5:00 de la tarde, las hostilidades de hoy con un escenario festivo, ya que por adelantado, vestirá sus mejores galas para recordar el natalicio de Juan Pablo Duarte, que es celebrado mañana en todo el país.

Con una serie dominada 4-0, los Tigres buscarán aplicar la barredora a los Gigantes del Cibao, conjunto que podría decir que tiene la moral en alto, pero que en los rostros de los jugadores se refleja el desconcierto y el poco ánimo.

El lanzador de Grandes Ligas, Ervin Santana, con una salida desastrosa en la vuelta regular y una más aceptable en la de semifondo, presentará credenciales en estas finales y tratará de ayudar a buscar el triunfo a los Tigres que no ganan un campeonato nacional desde la temporada del 2005-06, cuaando con Rafael Landestoy a la cabeza vencieron en las finales 5-2 a las Aguilas del Cibaeñas.

Contando desde el 1951 sería la corona número 20 que alcanza el equipo añil en la pelota dominicana.

En la vuelta del “Todos contra Todos”, Santana tuvo dos salidas y marcó efectividad de 5.58 con marca de 1-1.

“Esperamos que nuestro abridor nos de cinco o seis entradas de calidad, mientras la ofensiva se encarga de producir”, fueron las palabras de José Offerman, quien el pasado viernes, a pesar del triunfo dijo que el equipo no está confiado.

Los Tigres del Licey, legendario equipo de la pelota local, aunque no ganó la representación Nacional, estuvo el pasado año en la Serie del Caribe como invitado, ganando dicho evento.

“Hay tiempo para pensar en cualquier eventualidad, estamos delante, pero no nos fiamos y jugaremos duro”, precisó uno de los pilares del conjunto, el jugador del cuadro Anderson Hernández.

Por el lado azul todo está a pedir de boca, mientras los Gigantes, a pesar de haber tenido una muy buena reacción el viernes, cuando cayeron vencidos 2-1, en un partido que fue paralizado en la sexta entradas debido a la lluvia, siguen atónitos por las tres derrotas que han sufrido por situaciones de todos sabidas.

El zurdo Pedro Viola, participación en la final, viene precedido de actuaciones muy pobres en las vueltas regulares y semifinales donde alcanzó efectividades de 11.25 y 7.56 respectivamente. No obstante a la diferencia en cuanto a posibilidades de triunfo, los Gigantes que se pasaron toda la vuelta regular bateando, todavía tienen esta arma activa y podrían hoy alargar la serie que de producirse, ahora sí se estaría jugando en San Francisco de Macorís.

Las palabras de optimismo del dirigente de los Nordestanos, Luis Dorante, son un estímulo para los jugadores, pero la realidad podría ser otra.

“Vamos a luchar contra la adversidad y saldremos victoriosos”, expuso el pasado viernes el dirigente venezolano.