La institución del orden dice que aún no ha podido identificar a los occisos, y que persigue a otros seis hombres implicados en el caso
SANTO DOMINGO.- La Policía informó la mañana de este domingo que dos de los supuestos secuestradores Eduardo Baldera Gómez cayeron en un enfrentamiento a tiros con agentes policiales en Villa Vásquez, en la madrugada de hoy.
En una rueda de prensa en la que estaban presente Eduardo y parte de su familia, la institución del orden dice que no se han identificado a los occisos.
En el enfrentamiento también resultó herido de bala el sargento Catalino Jesús Pérez, quien habría sido uno de los tres agentes que rescataron a Baldera Gómez, en el sector El Copey, cinco horas después de éste habérsele escapado a sus captores y en el momento en que cayó por un barranco.
El jefe de la Policía, Rafael Guillermo Guzmán Fermín aseguró nuevamente que los familiares de Baldera Gómez no habían pagado dinero a los secuestrados por su liberación.
Asimismo, aseguró protección policial a la familia Baldera Gómez, y de que se le suministrará psicólogo y psiquiatra que va a tratar a toda la familia, además de que dispondrán de servicios especiales para los testigos, a los cuales se dará toda la seguridad de lugar. Prófugos
Guzmán Fermín identificó a un tal Ramón Polanco, como cabecilla del grupo de secuestradores, así como a Alcadio Mercado, alias Chino, a Juan Almonte, Rafael Leonardo Hernández, Rubén Darío Silvestre Cismero y Cecilio Díaz alias Manuel, quienes están prófugos.
Insiste que en el crimen que hay manos poderosas que incubren a los criminales envueltos en el plagio, pero se negó a revelar nombres argumentando que lo hará cuando concluyan las investigaciones.
Dijo que la Marina de Guerra tiene acordona la costa desde Villa Vásquez hasta Puerto Plata en busca de los prófugos. Cinco horas caminó hasta ser socorrido
El joven Baldera Gómez relató que se les escapó a dos de sus secuestradores a las cinco de la mañana del sábado, después de permanecer secuestrado por 23 días, y que caminó durante cinco horas hasta ser hallado por los agentes policiales.
Sostuvo que los que lo custodiaban permanecían todo el tiempo encapuchados, por lo que sólo les podía ver los ojos. Inmediatamente llegó a Nagua fue recibido por una multitud que le hizo fiesta hasta tarde de la noche del sábado.
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