Chile.- Un fuerte sismo de magnitud 6,4 sacudió el miércoles por la noche el norte de Chile y el sur de Perú, según el Servicio Sismológico de Estados Unidos, sin ocasionar víctimas, pero sí interrupciones en el servicio telefónico y cortes parciales de energía eléctrica en ciudades del norte chileno.
El sismo se registró a las 22:42 horas (02:42GMT del jueves) con epicentro a 55 kilómetros al noroeste del puerto chileno de Arica, 2.000 kilómetros al norte de Santiago, y a 25 kilómetros al oeste de la ciudad peruana de Tacna. El temblor ocurrió a una profundidad de 11 kilómetros.
La Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior (Onemi) dijo que las intensidades fueron de 5 en Arica, 4 en Camiña, Iquique y Pozo Almonte, 3 en Huara y 2 en Pica.
El Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la armada descartó la ocurrencia de un tsunami, aunque decenas de personas dejaron sus viviendas costeras y se alejaron de la costa.
Johaziel Jamett, jefe del Centro Nacional de Alerta Temprana de la Onemi declaró que de momento no hay informes de víctimas ni daños, y dijo que hay cortes telefónicos e interrupciones parciales de energía eléctrica en el puerto de Arica.
En Perú, el vocero del Servicio de Información de la Defensa Civil, Edgard López, dijo en declaraciones telefónicas a la AP que no había reportes inmediatos de heridos. El sismo fue sentido en suelo peruano a las 21:42 porque el país está una hora atrás de Chile.
La estación Radioprogramas informó que Tacna se encontraba sin fluido eléctrico dos horas después de ocurrido el movimiento. El sismo también se sintió en las vecinas regiones de Moquegua y Arequipa.
En las últimas semanas se han registrado varios sismos fuertes en el norte chileno, incluso uno el martes de magnitud 5,5 en Antofagasta, vecina a Arica, pero el movimiento de este miércoles es el de mayor magnitud.
Los chilenos aún tienen en la retina el terremoto de magnitud 8,8 y un posterior tsunami que dejaron 486 muertos y 79 desaparecidos en una franja de 600 kilómetros del centro sur chileno. El sismo también causó daños por 30.000 millones de dólares, según cifras oficiales, que incluyen la destrucción parcial o total de 500.000 viviendas. Los damnificados viven ahora con familiares, en precarias casas de emergencia o en carpas.
Según sismólogos, en el extremo norte chileno es posible un fuerte terremoto porque hace más de un siglo que no ocurre uno, lo que implica que se ha acumulado una gran cantidad de energía que debería liberarse en 10 o 20 años.
Esa región de Chile se encuentra a cientos de kilómetros (milals) de la zona azotada por el terremoto de febrero.
El 15 de agosto del 2007, un terremoto con magnitud 8 dejó 596 muertos y destruyó la ciudad peruana de Pisco.
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