Bogotá, 24 dic (EFE).- Una comisión inspecciona hoy la población de La Cruz, en el departamento colombiano de Nariño, en donde un alud de tierra causó la muerte a 12 personas, mientras otras 25 resultaron heridas, en una seguidilla de tragedias por las fuertes lluvias en el país que ya deja 296 víctimas mortales.
Colombia llegó al día de Navidad en medio de la emergencia por las lluvias con un saldo de 294 heridos, más de 2,16 millones de damnificados y unos 1,32 millones de hectáreas de tierras agropecuarias inundadas.
El saldo trágico de víctimas se elevó, tras el alud de tierra que se registró este jueves en el caserío de San Genaro, en el departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, con doce muertos y 25 heridos.
Una comisión gubernamental del departamento de Nariño encabezada por el gobernador Antonio Navarro, estuvo inspeccionando el sitio y señaló que pese a que inicialmente se indicó que había un sobreviviente, por unas supuestas voces bajo los escombros, se confirmó que se trata de un animal doméstico.
"Se ha descartado que sea un persona; es, al parecer, un perro", dijo a Efe la portavoz de la Gobernación de Nariño, Marcela González.
A pesar de ser un animal, "están tratando de rescatarlo", dijo González, quien señaló que la posibilidad del sobreviviente fue descartada desde el caserío del desastre, durante una visita del gobernador Navarro.
El derrumbe de la montaña, al parecer asociado a las fuertes lluvias, tapó al menos cinco viviendas y una taberna, y causó heridas a 27 personas, cuatro de las cuales -las más graves- fueron trasladados a Pasto, la capital departamental, en donde se les presta atención médica.
Durante su visita a La Cruz, cabecera municipal a la que pertenece San Gerardo, Navarro, además de inspeccionar las labores que se adelantan para atender la emergencia, trata de persuadir a los lugareños para que salgan de la zona, pues están en zona de peligro unas 400 personas.
"El gobernador intenta persuadir a las personas para que abandonen la zona", indicó la portavoz González, quien aclaró que, además de San Gerardo, en La Cruz hay otras tres zonas que han sido declaradas en riesgo.
Por su lado, el vicepresidente colombiano, Angelino Garzón, lamentó la tragedia y se solidarizó con los nariñenses al expresar: "nuestro dolor por la muerte de estas personas y nuestras condolencias a sus familias".
Al tiempo que llamó a la solidaridad, les recomendó a los pobladores de la zona seguir las indicaciones de los organismos de socorro y del alcalde para evitar que nuevos deslizamientos de tierra causen otra emergencia.
La tragedia en este caserío es la segunda por número de víctimas que se registra en Colombia durante el actual período lluvioso, después de la de La Gabriela, barriada de la localidad de Bello (noroeste).
Allí, un deslizamiento de tierras mató el pasado 5 de diciembre a 82 personas.
Aunque las lluvias afectan fuertemente a 28 de los 32 departamentos colombianos, las más afectadas han sido las regiones del Caribe, el suroeste, el centro y el este.
Las lluvias torrenciales y los aludes han destruido kilómetros de carreteras, lo que afecta las rutas por las que millones de personas se desplazan por esta época de festividades navideñas y, también, la de fin de año.
Según el más reciente reporte de la Policía colombiana, las lluvias dejan ya 296 muertos, 294 heridos, 63 desaparecidos y 3.353 viviendas destruidas.
También han muerto 300.000 aves ponedoras y 70.000 bovinos, y "al menos 1.500.000 vacunos fueron desplazados por las inundaciones", según lo indicado por el ministro el ministro colombiano de Agricultura, Juan Camilo Restrepo.
El Gobierno colombiano calcula que las lluvias han causado daños por diez billones de pesos (más de 5.184,81 millones de dólares). EFE
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