Fernández, durante su rendición de cuentas ante la Asamblea.
SANTO DOMINGO..-1 marzo.- La desatención manifestada por empresarios y miembros de la sociedad civil con su inasistencia al acto de rendición de cuentas del Presidente de la República ante la Asamblea Nacional, así como las críticas de la Iglesia Católica por la sordera oficial ante las demandas de la población, develan un acentuado disgusto de segmentos importantes de la sociedad con el gobierno del presidente Leonel Fernández.
La censura hecha por monseñor Vítor Masalles durante el Tedeum con motivo del 167 aniversario de la Independencia Nacional a los logros de progreso y desarrollo ponderados por el presidente Fernández, no fueron nuevos, pues el Episcopado, a través de su carta pastoral del pasado 15 de Febrero, había abordado de manera crítica la falta de respuesta oficial a reclamos fundamentales de la población.
Hace más de una semana que los obispos dominicanos cuestionaban en su Carta Pastoral que muchos jóvenes deben abandonar los estudios en primeros grados por existir en el país un sistema educativo ineficiente y clamaban por mejores condiciones de vida para los más desposeídos.
Previo al documento del Episcopado, el obispo de La Vega, Antonio Camilo, advertía que la reelección presidencial sería muy perjudicial para el país, criticando a los que promueven una reforma constitucional para tales fines. "Debemos respetar la Constitución, ya que ni siquiera todavía se ha secado la tinta de la nueva reforma constitucional", dijo.
En coincidencia con empresarios y sectores de la sociedad civil, la Iglesia Católica ha respaldado movimientos de protestas que reclaman 4% para la educación, mejoría en el servicio energético y que se castigue el desvío de los recursos estatales.
Pero a juicio del sociólogo Pedro Catrain, el "desplante" de empresarios y representantes de la sociedad civil al discurso de rendición de cuentas, se debe a que en los últimos tiempos en el país se está haciendo una oposición social frente a los problemas que aquejan a la nación.
"Vimos como esa sociedad civil, incluyendo al empresariado, se integró en esa gran jornada social que fue la lucha por el cuatro por ciento. Observe que el Presidente le dio la espalda a ese movimiento y trata de justificar su violación a la ley con un aumento insignificante al presupuesto de educación", dice Catrain.
Nuevo método
Las nuevas metodologías de protestas iniciadas recientemente por un también novedoso grupo de la sociedad civil integrado por jóvenes estudiantes, profesionales y elementos de la clase media, ha puesto en alerta al Gobierno por el éxito que han tenido.
Sin quemar gomas, ni paralizar el tránsito, ni hacer daño a la propiedad privada, este grupo ha ido consiguiendo cada día más adeptos, y aunque empezaron con protestas pacíficas demandando el 4% del PIB para la educación y los denominados "lunes amarillos", ya han participado en otras jornadas de demandas contra el Gobierno.
Falta de respuesta estatal
El sociólogo Pedro Catrain dice que igual que con los problemas fundamentales de los sectores populares del país y el Gobierno, los empresarios reciben la misma respuesta oficial. Expresa que los problema principales del sector empresarial como energía eléctrica y la seguridad ciudadana, no reciben respuesta de parte del Presidente de la República. "La sociedad civil es la única que ha hecho una oposición al Gobierno, porque los partidos políticos tradicionales no hacen oposición, ni el Partido Revolucionario Dominicano, ni el Partido Reformista Social Cristiano", expresó.
La censura hecha por monseñor Vítor Masalles durante el Tedeum con motivo del 167 aniversario de la Independencia Nacional a los logros de progreso y desarrollo ponderados por el presidente Fernández, no fueron nuevos, pues el Episcopado, a través de su carta pastoral del pasado 15 de Febrero, había abordado de manera crítica la falta de respuesta oficial a reclamos fundamentales de la población.
Hace más de una semana que los obispos dominicanos cuestionaban en su Carta Pastoral que muchos jóvenes deben abandonar los estudios en primeros grados por existir en el país un sistema educativo ineficiente y clamaban por mejores condiciones de vida para los más desposeídos.
Previo al documento del Episcopado, el obispo de La Vega, Antonio Camilo, advertía que la reelección presidencial sería muy perjudicial para el país, criticando a los que promueven una reforma constitucional para tales fines. "Debemos respetar la Constitución, ya que ni siquiera todavía se ha secado la tinta de la nueva reforma constitucional", dijo.
En coincidencia con empresarios y sectores de la sociedad civil, la Iglesia Católica ha respaldado movimientos de protestas que reclaman 4% para la educación, mejoría en el servicio energético y que se castigue el desvío de los recursos estatales.
Pero a juicio del sociólogo Pedro Catrain, el "desplante" de empresarios y representantes de la sociedad civil al discurso de rendición de cuentas, se debe a que en los últimos tiempos en el país se está haciendo una oposición social frente a los problemas que aquejan a la nación.
"Vimos como esa sociedad civil, incluyendo al empresariado, se integró en esa gran jornada social que fue la lucha por el cuatro por ciento. Observe que el Presidente le dio la espalda a ese movimiento y trata de justificar su violación a la ley con un aumento insignificante al presupuesto de educación", dice Catrain.
Nuevo método
Las nuevas metodologías de protestas iniciadas recientemente por un también novedoso grupo de la sociedad civil integrado por jóvenes estudiantes, profesionales y elementos de la clase media, ha puesto en alerta al Gobierno por el éxito que han tenido.
Sin quemar gomas, ni paralizar el tránsito, ni hacer daño a la propiedad privada, este grupo ha ido consiguiendo cada día más adeptos, y aunque empezaron con protestas pacíficas demandando el 4% del PIB para la educación y los denominados "lunes amarillos", ya han participado en otras jornadas de demandas contra el Gobierno.
Falta de respuesta estatal
El sociólogo Pedro Catrain dice que igual que con los problemas fundamentales de los sectores populares del país y el Gobierno, los empresarios reciben la misma respuesta oficial. Expresa que los problema principales del sector empresarial como energía eléctrica y la seguridad ciudadana, no reciben respuesta de parte del Presidente de la República. "La sociedad civil es la única que ha hecho una oposición al Gobierno, porque los partidos políticos tradicionales no hacen oposición, ni el Partido Revolucionario Dominicano, ni el Partido Reformista Social Cristiano", expresó.
De LEONCIO COMPRÉS
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