19 de octubre de 2012

Humberto Salazar dice Amable es un “gran sinvergüenza” si quiere volver PRSC



El dirigente reformista Humberto Salazar definió al senador Amable Aristy Castro como un “gran sinvergüenza” porque después que traicionó al partido en las pasadas elecciones para apoyar públicamente la candidatura presidencial de Hipólito Mejía ahora quiere regresar y aspirar a la presidencia de la organización “como si nada hubiera ocurrido”. Salazar, quien es miembro de la Comisión Presidencial Permanente (CPP), máximo órgano de dirección del PRSC, sostuvo que Aristy Castro ya no es miembro de esa organización por lo que el Tribunal Superior Electoral (TSE) puede fallar lo que quiera sobre la instancia que elevó  a ese tribunal el ex dirigente reformista “y como quiera seguirá fuera del partido”.

 “Amable Aristy lo que le conviene es estar tranquilo y si no me quiere escuchar que siga su camino como lo siguió en las pasadas elecciones del 20 de mayo al lado del PRD y
el PPH”, dijo.

 Explicó que el término “vergüenza” es un sentimiento humano en el cual las personas asumen una situación de deshonor o culpa y en el caso de Amable Aristy  con esas declaraciones de que quiere ser el presidente del PRSC “lo que demuestra es que es un gran sinvergüenza”.

 Recordó que el senador por la provincia La Altagracia abandonó el partido después que perdió las votaciones internas de los diferentes organismos de dirección cuando se definía la participación del PRSC de cara a las elecciones del 20 de mayo, pasando a respaldar al candidato contrario, Hipólito Mejía.

 “Nosotros tenemos los videos de su participación en la campaña electoral al lado de Hipólito, entonces tiene que ser un gran sinvergüenza para querer volver al partido”, insistió.

 Salazar dijo que Aristy Castro fue de los primeros que propuso a Carlos Morales Troncoso como presidente de la organización, poco después de las elecciones de 2008 en la que él se presentó como candidato presidencial y obtuvo la más baja votación de la historia del Partido Reformista, lo que le representó al reformismo perder el financiamiento al caer como una fuerza minoritaria.

 Humberto Salazar señaló que en su casa se hicieron las primeras reuniones y Amable fue de los que participó en esos encuentros proponiendo a Morales Troncoso como la tabla de salvación del reformismo, “y sin embargo se fue con Hipólito Mejía y pintó de blanco el local del partido en Higüey”.

Insistió que Aristy Castro y todos los que se fueron a conspirar en contra del Partido Reformista no puede volver a la organización y si el TSE le da ganancia de causa “simplemente serán sometidos a un juicio interno del partido e inmediatamente serán suspendidos y expulsados en forma deshonrosa”.

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