SANTO DOMINGO.- María Reyes llegó hoy en la mañana a Santo Domingo desde Tamayo, en la provincia de Bahoruco, con su hijo, para que recibiera atenciones en el hospital Dario Contreras. A las seis de la tarde tenía tres horas varada en la Prolongación 27 de Febrero con Isabel Aguiar ("Pintura"), esperando una guagua para regresar a su hogar.
Ella era una de las cientos de personas que se encontraban en esta intercepción sin esperanzas de trasladarse a la región sur, a causa de un paro de las unidades de la Federación Nacional de Transportistas la Nueva Opción (Fenatrano) que viajan a esta zona ante el conflicto que mantiene con Unión de Transportistas y Afines (Unatrafin).
Aliro Ortiz Valdez, representante de Fenatrano de la ruta Santo Domingo-Elías Piña, dijo que los dueños de Unatrafin "no quieren sentarse en la mesa de diálogo" para discutir los "cobros abusivos" por la parada obligatoria en el Parador Cruce de Ocoa, del que también son propietarios.
Apuntó que el paro de autobuses desde la parada de "Pintura", que hoy se encontraba custodiada por agentes de la Policía Nacional, seguirá por tiempo indefinido.
En tanto, en la parada de Unatrafin, ubicada en la avenida 27 de Febrero con la calle Teniente Amado García, las guaguas reiniciaron sus operaciones pasada las 6:00 de la tarde de hoy. También estaba vigilada por policías.
Su presidente, Arsenio Quevedo, informó que están en disposición de ofrecer el servicio siempre que las autoridades de la Oficina Técnica de Transporte Terrestre garanticen protección de sus unidades. El miércoles una unidad de este sindicato fue baleada resultando heridas tres personas.
Unatrafin acusa a Fenatrano y Conatra de extorsión para sacarlos del parador.
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