CALIFORNIA.-Bruce Lee, el carismático y referente mortal de las artes marciales en el continente americano, cumple este sábado 20 de julio, 40 años de su fallecimiento, el cual aún mantiene el enigma o incógnita sobre la verdadera causa del deceso.
Nacido en San Francisco, California, en 1940, Lee logró fama y prestigio por desarrollar casi a la perfección el kung-fu (vocablo chino que significa habilidad adquirida a través del tiempo, con esfuerzo, dedicación y continuidad).
El kung fu alcanzó gran popularidad a finales de la década del 60s y principios de los 70s, gracias a las películas ‘El Avispón Verde’ y ‘Kung Fu’. Luego, con otras del celuloide que estelarizada Lee, tales como ‘Contacto en China’, ‘Gran Jefe’, ‘Operación Dragón’, ‘El Gran Jefe’, ‘Puño de Furia’ y muchas otras más.
En el verano de 1970, Lee giró una vista de cortesía a República Dominicana por invitación del maestro John Rhee, quien tenía una academia en la Socorro Sánchez, entre avenida Independencia y George Washington.
Luego, una exhibición en el Teatro Agua & Luz, en el Centro de los Héroes, Maimón y Estero Hondo. Allí impresionó a los presentes con flexiones (lagartijas) sobre dos dedos de su mano, causando gran impacto y aceptación entre los asistentes.
A la exhibición asistieron los karatecas criollos más reconocido de la época. Sócrates y Norberto Puello, Rafael y Marcos Guilamo, Ramón Smith, César Rímoli y Jorge Suncar.
A través del duro entrenamiento. Bruce Lee era un hombre de pura fibra en sus músculos, pero con una agilidad pasmosa e impecable.
El día de su muerte, Lee se encontraba en el apartamento de una amiga para una cita con un productor de cine. Allí se encontró con un dolor de cabeza insoportable que lo obligó a acostarse en una cama.
Su amiga le suministró un analgésico que le sumió en una profunda inconsciencia de la cual no despertó, entrando en estado de coma. Fue llevado al hospital, del que no regresó con vida.
Actualmente todavía se especula sobre las causas de su muerte, ya que nadie sabe aún por qué fue. La más posible es que pudo haber muerto por una complicación derivada de un ataque de epilepsa, efecto que sólo después de 40 años de su muerte la medicina parece haber descubierto.
Nacido en San Francisco, California, en 1940, Lee logró fama y prestigio por desarrollar casi a la perfección el kung-fu (vocablo chino que significa habilidad adquirida a través del tiempo, con esfuerzo, dedicación y continuidad).
El kung fu alcanzó gran popularidad a finales de la década del 60s y principios de los 70s, gracias a las películas ‘El Avispón Verde’ y ‘Kung Fu’. Luego, con otras del celuloide que estelarizada Lee, tales como ‘Contacto en China’, ‘Gran Jefe’, ‘Operación Dragón’, ‘El Gran Jefe’, ‘Puño de Furia’ y muchas otras más.
En el verano de 1970, Lee giró una vista de cortesía a República Dominicana por invitación del maestro John Rhee, quien tenía una academia en la Socorro Sánchez, entre avenida Independencia y George Washington.
Luego, una exhibición en el Teatro Agua & Luz, en el Centro de los Héroes, Maimón y Estero Hondo. Allí impresionó a los presentes con flexiones (lagartijas) sobre dos dedos de su mano, causando gran impacto y aceptación entre los asistentes.
A la exhibición asistieron los karatecas criollos más reconocido de la época. Sócrates y Norberto Puello, Rafael y Marcos Guilamo, Ramón Smith, César Rímoli y Jorge Suncar.
A través del duro entrenamiento. Bruce Lee era un hombre de pura fibra en sus músculos, pero con una agilidad pasmosa e impecable.
El día de su muerte, Lee se encontraba en el apartamento de una amiga para una cita con un productor de cine. Allí se encontró con un dolor de cabeza insoportable que lo obligó a acostarse en una cama.
Su amiga le suministró un analgésico que le sumió en una profunda inconsciencia de la cual no despertó, entrando en estado de coma. Fue llevado al hospital, del que no regresó con vida.
Actualmente todavía se especula sobre las causas de su muerte, ya que nadie sabe aún por qué fue. La más posible es que pudo haber muerto por una complicación derivada de un ataque de epilepsa, efecto que sólo después de 40 años de su muerte la medicina parece haber descubierto.
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