El mundo descontento por precio de gasolina

Estudiantes universitarios protestan en Yakarta, Indonesia, ayer sábado, por los aumentos de hasta un 30 por ciento en los precios de los combustibles. Protestas similares se han registrado en otros lugares como Manila y Francia, donde los combustibles también han subido de precio. Arrastrados por los del petróleo, que esta semana superaron los 135 dólares el barril, los altos precios de la gasolina y el gasóleo han sembrado un descontento en todo el mundo que se tradujo en numerosas manifestaciones y huelgas. Las protestas de los pescadores franceses, que han logrado que el gobierno les ayude a hacer frente al alza del precio del gasóleo, serán emuladas en España y Portugal. Los pescadores españoles han convocado una manifestación en Madrid a finales de mayo y amenazan con ir a la huelga en junio si no logran las ayudas. "Pedimos medidas similares a las tomadas en Francia, con reducciones de las cotizaciones y de los impuestos", explicó José Antonio Suárez, responsable de una asociación de armadores de Vigo. En Portugal, los pescadores han convocado una huelga el 30 de mayo. "Nuestra actividad no es la más rentable. En tres años hemos soportado solos el alza de los precios del carburante sin ningun apoyo de los poderes públicos", dijo el presidente de los armadores del puerto de Peniche, Humberto Jorge. En Rusia, que paradójicamente es el segundo productor mundial de petróleo, los automovilistas organizaron manifestaciones este sábado en cerca de 50 ciudades del país. El presidente de la asociación de defensa de los automovilistas, Viacheslav Lisakov, acusó al gobierno de imponer impuestos que suponen "del 60% al 70% del precio" de la gasolina y, por tanto, de "aprovecharse" del aumento de su coste. También en Europa, los conductores de autocares húngaros se manifestaron el viernes y amenazan con ir a la huelga. El precio del gasóleo en Hungría (1,30 euros el litro), es actualmente más elevado que en nueve otros países de la Unión Europea, según una tabla comparativa publicada por la prensa del país centroeuropeo. Aún así, sigue siendo más bajo que en Italia (1,53 euros), Holanda (1,44 euros), Bélgica (1,40), Alemania (1,38), Finlandia (1,36) y Francia (1,35), según cifras de la semana del 18 al 24 de mayo reunidas por la Unión Internacional de Transporte en Carretera. En Asia, muchos gobiernos han reducido las subvenciones que permitían mantener artificialmente bajos los precios de los carburantes. Así, en Indonesia los precios subieron el sábado un 28,7%, sin que las autoridades descarten nuevas alzas, lo que llevó a los consumidores a manifestarse en Yakarta en unas protestas que se saldaron con más de 100 detenciones el viernes y el sábado. "No hay garantías" de que los precios no vuelvan a aumentar, dijo el viernes el vicepresidente Jusuf Kalla, pero "ésto no afectará a los pobres". Indonesia, el cuarto país más poblado del mundo y productor de petróleo, subvenciona mucho la gasolina pero el presupuesto del Estado se ha visto lastrado por los altos precios del petróleo. Para compensar el aumento, el gobierno concederá 1.500 millones de dólares en subvenciones a los más pobres. En India el aumento de los precios es "inevitable" para ayudar a las empresas públicas que se ocupan de la venta de carburantes a precios largamente subvencionados, explicó el viernes el ministro del Petróleo, M. S. Srinivasan. Un aumento que, según la prensa india, podría ser de más de 20% en el caso de la gasolina y de 16% en el del gasóleo.